Hay mucho controversia entre lo correcto lo permitido y lo más perfecto y entre hermanos católicos hay muchas diferencias entre lo que unos y otros creen. Todos debemos de tener un mismo pensar porque es pensando igual que somos uno en el Cuerpo de Cristo que es la Iglesia y con esto quiero decir que lo que le diga el catecismo y el magisterio de la Iglesia Católica eso es lo que el católico debe creer y no contradecir, esto debería ser así y todos deberíamos pensar lo mismo en esta cuestión.
Pero hay formas de actuar y de comprender el evangelio que a veces pueden generar cierta controversia entre lo que unos y otros creen. Hay cosas que la Iglesia permite que a veces el evangelio no habla de ello.
Por ejemplo la comunión en la mano o en la boca. El evangelio que yo sepa no te dice lo que es lo mejor y la Iglesia permite la comunión en la mano y en la boca, así lo dice el catecismo. Aunque la Iglesia permita la comunión en la mano el que quiera ser perfecto como Dios es perfecto. (Por tanto, sed vosotros perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto. Mateo 5, 48), actúe como quien quiere ser perfecto en todo y cuestiónese a sí mismo todo para que la razón lo lleve a lo más perfecto.
Para mí si en la hostia consagrada está Jesucristo y esto me lo dice la fe de la Iglesia Católica es claro para mí que lo recibiré en la boca y que eso es más perfecto.
Porque dos pasos: Mano-boca y no uno: boca. ¿No es Dios la eucaristía?, ¿No es el Verbo con quien Dios creo el Universo?, ¿No es entonces lo normal recibirlo en la boca antes que en la mano?, ¿No es más perfecto recibirlo al Creador en la boca? Para mí es claro que si es más perfecto. Y el evangelio no me dice la forma en que debo hacerlo, pero si me revela quien es Jesús y actúo en consecuencia.
En todas las cuestiones de la vida el evangelio nos dirá un cosa, cada uno según su estado y el tiempo que le dedique a pensar en estas cosas verá una cosa u otra y cuando no lo vea quizás vaya a ver el catecismo pero no siempre hallará una respuesta clara sobre todos los temas. Podemos hacer lo permitido o lo más perfecto.
En la cuestión sobre la defensa de uno mismo el catecismo nos dice varias cosas es largo y sólo pondré esto:
2264 El amor a sí mismo constituye un principio fundamental de la moralidad. Es, por tanto, legítimo hacer respetar el propio derecho a la vida. El que defiende su vida no es culpable de homicidio, incluso cuando se ve obligado a asestar a su agresor un golpe mortal:
«Si para defenderse se ejerce una violencia mayor que la necesaria, se trataría de una acción ilícita. Pero si se rechaza la violencia en forma mesurada, la acción sería lícita […] y no es necesario para la salvación que se omita este acto de protección mesurada a fin de evitar matar al otro, pues es mayor la obligación que se tiene de velar por la propia vida que por la de otro» (Santo Tomás de Aquino, Summa theologiae, 2-2, q. 64, a. 7).
El católico no puede negar lo que dice la Iglesia Católica ya que si lo hace se separa de la misma. Sin embargo el católico está en su derecho de desear actuar de forma diferente si cuando él actúa cree estar respondiendo a lo que él entiende del evangelio y no por ello está negando el catecismo, siempre y cuando lo que él entiende no contradiga lo que la Iglesia enseña sobre el evangelio. Esto algunas personas no logran entenderlo.
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Pondré unos ejemplos que ilustran esto:
Yo tengo un tamaño considerable se puede decir que soy bastante corpulento pero hace unos años un niño gitano y bajito me puso un destornillador en la garganta, me amenazaba diciéndome que ni con sus 13 años tenía miedo de nada, su padre en la cárcel me dijo que me iba a matar. Yo podría haberle asestado una buena torta pensando que a lo mejor mi vida peligraba y según el catecismo hubiera estado en mi derecho pero le hablé del evangelio y de Jesús y me dejó.
Tengo muchas anécdotas pero prefiero dejarlas en el secreto del corazón de Dios quien todo lo ha visto y ve la intención de mi corazón que no es otra que amar a mi prójimo tanto como Jesús lo hace, ese es mi deseo profundo y lo es tanto que incluso cuando sueño actúo como me dicta el corazón.
El año pasado soñé que estaba caminando por un pueblo, vino a mi un hombre y se tiró encima de mi, él me estrangulaba y yo estaba en el suelo cuando de repente una pistola apareció en mi mano y pensé que me podía defender pero al mismo instante que pensé eso tiré la pistola lo más lejos que puede y empece a gritar: Virgen María!!!! Virgen María!!!! Ayúdame!!!! el hombre me soltó y se fue.
Según lo que dice el catecismo yo podría haberme defendido quizás disparando a mi agresor pero yo creo tanto en mi corazón que soy hijo de Dios que mi Padre celestial que es todopoderoso hará todo cuanto yo le pida.
Y me pregunto que será más perfecto: ¿Pegarle un tiro al agresor o confiar que mi Madre del Cielo vendrá en mi auxilio? Que cada uno responda lo que quiera. Y que quede claro sin confusión alguna y que nadie ponga en mis labios que estoy negando el catecismo de la Iglesia Católica porque no es así. Es licito según el catecismo defenderse de forma proporcional. Yo rezo todos los rosarios que puedo cada día, confío plenamente en el Señor, en la Virgen María, hablo con ellos estoy en su presencia y en su confianza, voy todos los días a misa y todos los días a la adoración eucarística y se que ellos están aquí ahora conmigo para defenderme si es necesario. No lo dudo, lo vivo.
Mi arma es mi fe y mi rosario. Empuña el arma que tu quieras pero trata de hacer lo más perfecto y sino puedes hacerlo no te preocupes no es más ni menos, si crees lo que dice la Iglesia pues está muy bien mantente fiel en la fe católica. Es lo correcto.
Si yo actúo frente a la violencia hacia mí mismo o hacia otros con amor y prefiero en lugar de usar una arma usar mi fe en eso no estoy contradiciendo el catecismo es que para mí eso es lo que Jesús en la Cruz me comunica.
Lo correcto y lo permitido no siempre es lo perfecto.
Nuestra lucha no es contra sangre y carne; sino contra principados, contra potestades, contra señores del siglo, poderes de las tinieblas, contra malicias espirituales en los cielos. Ef 6,12
Si la Virgen María con mi oración para el demonio que está molestando a mi agresor, todo termina en paz.
Que Dios te bendiga y te llene de sus gracia y sus favores.
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