El Santo Rosario:
El Santo Rosario es una oración que desde hace siglos está cambiando la vida de miles de personas en todo el mundo, esta oración es el Santo Rosario y tu mismo puedes sumarte hoy mismo a las millones de personas que han podido transformar su vida gracias a la contemplación de los misterios de nuestra fe a través del rezo de esta oración mariana.
Lo primero que debemos entender es dónde reside el poder transformador del Santo Rosario, cuál es el secreto del Santo Rosario y cuál es el misterio por el que esta sencilla oración ha cambiado la vida de tantas personas y hoy continua en esta obra transformadora de la humanidad.
Ese misterio escondido del Santo Rosario es Jesús nuestro Salvador, Él es el tesoro escondido en lo profundo del rosario. Él es quien, por medio de María está transformando nuestras vidas. El Rosario es como un cofre que guarda el mayor de los tesoros de la humanidad, al mismo Jesucristo. El que se acerca por tanto con amor y devoción al misterio del santo Rosario experimenta un encuentro sanador con Jesucristo a través de las manos de María.
Si el amor, y la devoción a María son el camino más corto y directo para llegar a Jesús, se entiende que la devoción mariana por excelencia el Santo Rosario, sea un instrumento en las manos de María para llevar a cabo su ministerio de llevar almas a su hijo.
Este secreto, o misterio del Santo Rosario es evidente para cualquier persona que observa con atención el Santo Rosario. ¿Qué es lo que meditamos en cada misterio del Santo Rosario? En cada misterio meditamos la vida de Jesús. El rosario es por tanto una oración cristocéntrica. La peculiaridad del rosario reside en que por medio de esta oración meditamos los misterios de la vida de Jesús con los ojos de María a la luz de su Inmaculado Corazón. La esencia del rosario consiste en aprender a contemplar la vida del Salvador con los sentimientos del Corazón de María.
Sabido esto, se entiende porque el santo rosario lleva desde hace siglos transformando la vida de tantísimas personas. Gracias al santo rosario muchos que estaban alejados de la fe han vuelto a abrazarla. Gente indiferente o atea a aceptado la existencia de Dios y ha tomado una vida de católico practicante gracias al Santo Rosario; el Santo Rosario ha ayudado a hermanos separados, evangélicos, testigos de Jehová, pentecostales, etc, a volver a la única iglesia fundada por Jesucristo. No en vano los hermanos separados no quieren oír hablar de María, no quieren darle una importancia destacada a María, a pesar de que el Evangelio la llama bienaventurada¸ y afirma que está bendita entre todas las mujeres. Ellos saben que el amor y la devoción a la Virgen María lo único que podría conseguir es arrebatarles adeptos y seguidores. Ellos no quieren oír hablar de María a pesar de que Ella sólo hable de Jesús. Pero el Jesús de María, no es el Jesus de los hermanos separados, ellos adulteran el mensaje de salvación de nuestro Señor, y María nos presenta a Jesús tal cual es, por ello el que conoce a María se hace católico, porque entiende que el Jesús de María, si es el Jesus de la Iglesia Católica.
Para entender esta capacidad del Santo Rosario debemos comprender que María es la fiel servidora del Señor, ella se ha unido a Él de tal forma, que son una misma cosa, ella se identifica con los sentimientos de Cristo y con sus pensamientos. María, más que ningún otro, puede decir aquello de San Pablo Ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mí, es Cristo quien vive en María, es Cristo quien transforma a través de María. Así es fácil de entender, una vez más, el gran poder del rezo del Santo Rosario.
Es, por tanto, de gran importancia, que los católicos aprendamos a contemplar los misterios de nuestra fe, a través del Rosario. Es, también, de gran importancia que los católicos nos hagamos misioneros del Santo Rosario, y enseñemos a otros a rezarlo, y que hablemos a otros de su gran poder, y del origen de este gran poder que guarda esta pequeña devoción.
En muchas ocasiones podemos caer en un pensamiento erróneo, y es pensar que Cristo ya le dará la gracia a la gente para que cambie de vida, que yo no tengo que preocuparme de eso. Y si bien es cierto que Cristo dará la gracia para que la gente se convierta, también es cierto, que Cristo quiere contar con nosotros para la conversión de los hermanos. Tenemos que tomar conciencia de que Cristo quiso fundar una Iglesia, la católica, para que fuera puerto de salvación para la humanidad, y que los católicos fueran servidores fieles de esta Iglesia y que trabajaran como apóstoles en el rescate de la humanidad, sabiendo, que es Él quien convierte, claro que si, pero él quiere que tu y yo colaboremos hombro con hombro con Él, en esta obra de amor, que es la predicación del evangelio, camino de salvación para todos.
Es por ello que tenemos el Santo Rosario. Cuando nuestra Madre María le entrega el Rosario a Santo Domingo de Guzmán, le dice que gracias a la predicación del Rosario se iban a convertir los herejes, y fueron miles y miles los que se convirtieron. Hoy, nosotros tenemos que seguir acercando a Cristo a través de María a las almas para que pueda continuar transformando la vida de tantas personas.
María cuenta contigo para esta obra de apostolado, no mires para otro lado, atiéndela, ella, ahora necesita tu sí, dáselo.
Tu donativo hace posible nuestra labor apostólica. Necesitamos que sigas ayudándonos con tu oración y si es posible con un pequeño donativo mensual o puntual. Gracias y que Dios te bendiga.