Noticias Estados Unidos: el secreto de confesión
La Cámara de Representantes del estado de Washington aprobó recientemente una propuesta de ley que obligaría al clero a violar el secreto de confesión en casos de abuso infantil. A pesar de que la versión del Senado del proyecto incluía una exención para el privilegio clero-penitente, la Cámara de Representantes eliminó dicha exención mediante una enmienda. La propuesta volvió al Senado, donde se rechazó la enmienda. Ahora, la Cámara tiene la opción de remover la enmienda y aprobar el proyecto de ley tal y como fue escrito por el Senado o aprobar el proyecto con nuevas condiciones que el Senado tendría que votar.
El arzobispo Paul Etienne de Seattle expresó su apoyo a la versión del Senado de la propuesta, ya que incluía la exención para el privilegio clero-penitente. Etienne enfatizó que la confidencialidad del sacramento de la reconciliación debe ser preservada para que los individuos puedan confesar sus pecados libremente. “Esta libertad religiosa debe ser protegida, tal como ha sido históricamente en nuestro país”, afirmó.
El obispo Thomas Daly de Spokane aseguró que tanto él como los sacerdotes están comprometidos a mantener el secreto de confesión, incluso si eso significa ir a la cárcel. Daly enfatizó que el sacramento de la penitencia es sagrado y seguirá siéndolo en la diócesis de Spokane.
En los últimos años, la propuesta de obligar al clero a violar el secreto de confesión ha sido presentada en al menos una docena de estados. Los partidarios argumentan que es necesaria para proteger a los niños, mientras que los oponentes consideran que obligar al clero a violar el secreto de confesión viola la libertad religiosa. La catequesis de la Iglesia Católica establece que el secreto nunca debe ser violado.
Aunque algunos argumentan que el proyecto de ley busca proteger a los niños, Daly y Etienne destacaron las reformas implementadas desde la aprobación de la Carta para la Protección de los Niños y Jóvenes en el 2002, así como la política de tolerancia cero en la Iglesia Católica de Estados Unidos. “Nuestro objetivo es hacer todo lo posible para mantener a sus hijos seguros mientras intentamos guiarlos a conocer y amar a Jesucristo”, afirmó Daly.
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