Comentario del evangelio del día: (Jn 12,24-26)
Caer en tierra parece una catástrofe. ¿A quién le agrada caer en tierra! Y morir parece menos atractivo todavía. Sin embargo, es el secreto de la vida. Nadie llega alto sin caer por tierra, nadie alcanza plenitud vital si no muere. Y eso ocurre cada dia. Somos como un grano de trigo. ¿Qué atractivo tiene un grano de trigo guardado eternamente en un frasco? Está entero, pero es inútil, intrascendente, infecundo. Lo bello es el grano de trigo que acepta caer en tierra, romperse, sufrir una aparente destrucción. Porque eso es en realidad destrozar la superficie para dejar brotar lo mejor, lo más bello, una vida más intensa y más rica. Aceptemos con fe esta invitación de Jesús, dejémonos romper cada día en la entrega confiada y generosa. Así estaremos mucho más vivos.