• 07/02/2025

Evangelio del día 28 de febrero 2023

Evangelio del día

Cita del evangelio del día: Mt 6,7-15

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Al orar, no charléis mucho, como los gentiles, que se figuran que por su palabrería van a ser escuchados. No seáis como ellos, porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes de pedírselo.

»Vosotros, pues, orad así: ‘Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu Nombre; venga tu Reino; hágase tu Voluntad así en la tierra como en el cielo. Nuestro pan cotidiano dánosle hoy; y perdónanos nuestras deudas, así como nosotros hemos perdonado a nuestros deudores; y no nos dejes caer en tentación, mas líbranos del mal’. Que si vosotros perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras ofensas».

Comentario del evangelio del día por San Cipriano:

Debemos recordar, hermanos queridos, cuando llamamos a Dios nuestro Padre, que debemos comportarnos como hijos de Dios… Debemos ser como templos de Dios (1Co 3,16), para que los hombres puedan ver que Dios vive en nosotros; nuestros actos no deben ser indignos del Espíritu… El apóstol Pablo declaró en su carta: » ¿Acaso no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu?… y no os pertenecéis, pues habéis sido comprados a buen precio, por eso ¡glorificad a Dios con vuestro cuerpo!” (1Co 6,19-20).

Rezamos: «Santificado sea tu nombre». Esto no es porque deseamos que Dios sea santificado por nuestras oraciones, sino porque le pedimos al Señor que su nombre sea santificado en nosotros. ¿Por quién podría ser santificado Dios, ya que es Él quien santifica? Él mismo dijo: «Sed santos porque yo soy santo» (Lev. 20,26). Por eso pedimos insistentemente que, ya que hemos sido santificados por el bautismo, seamos capaces de perseverar en lo que comenzamos a ser. Y rezamos por esto cada día.