Comentario del evangelio del día: (Mt 9,27-31)
Como hace Jesús sus prodigios en la vida de cada uno? Primero pregunta: “¿crees que puedo hacer esto?” Y luego dice: “hágase conforme a la fe que tienes”. Él ha querido necesitar de nuestra confianza, de nuestra apertura, de nuestra fe sincera. Pero es difícil para el corazón humano dejar de poner la confianza en sí mismo y confiar realmente, firmemente, sinceramente, en el poder y en el amor de Jesús. Él no quiere que seamos admiradores completamente pasivos, simples espectadores. Él requiere que el ser humano, al menos, ofrezca su confianza, una confianza que ha ido creciendo por la acción de la gracia y la docilidad interior. Pero como la fe es don de Él que nosotros aceptamos y recibimos, pidámosle con insistencia que Él mismo la derrame y la haga crecer en nuestros corazones.