Falsos milagros de la Madonna
Falsos milagros: La controversia alrededor de la «Madonna sangrante», el milagroso aumento de los ñoquis y los curas-007, ha sido nominada como la historia del año hasta ahora por el periódico Il Fatto Quotidiano. Esta historia comenzó en Trevignano Romano, una pequeña ciudad de aproximadamente 6.000 personas ubicada en la orilla del lago Bracciano a unos 40 minutos al norte de Roma. Allí vive Gisella Cardia, una mujer de 53 años originaria de Sicilia que tiene una estatua de la Madonna que compró en Medjugorje, la cual supuestamente ha estado sangrando por los ojos desde 2016. Cardia asegura que la Madonna también le ha estado dando revelaciones durante los últimos siete años.
Los devotos de la Madonna sangrante se reúnen el 3 de cada mes en un santuario improvisado erigido en un campo abierto de Trevignano Romano para rezar el rosario, venerar la estatua, hacer confesiones y escuchar las últimas revelaciones. Aunque algunos de los peregrinos son locales, muchos vienen de toda la península italiana.
La historia ha sido impulsada a las primeras planas de los periódicos por tres desarrollos. En primer lugar, un investigador privado contactado por los locales escépticos de la Madonna sangrante tuvo una reunión con los carabinieri, la policía militar italiana, el 4 de abril, en la que supuestamente presentó pruebas que sugieren que el líquido en la estatua es sangre de cerdo.
En segundo lugar, ha surgido un video de Cardia en el que habla de fenómenos sobrenaturales que afirma haber experimentado, incluyendo una ocasión en la que se encontró necesitando alimentar a 15 personas con solo unos pocos sobrantes del almuerzo del día anterior de ñoquis y conejo.
Sin embargo, cuando comenzó a servir los sobrantes recalentados, descubrió que la cantidad nunca disminuía sin importar cuánto sirviera. En Italia, obsesionada con la comida, el «milagro de los ñoquis» se ha convertido en una sensación.
En tercer lugar, informes de medios sugieren que los resultados preliminares de una investigación de la Diócesis de Civita Castellana se esperan que sean negativos, concluyendo que no hay nada sobrenatural en la estatua. La comisión para la diócesis está compuesta por un teólogo, un mariólogo, un psicólogo y un abogado canónico.
Mientras tanto, un periódico romano ha afirmado que como parte de la investigación, curas encubiertos vestidos con ropa de civil se unieron a la multitud durante la reunión del 3 de abril para rezar el rosario, tratando de entender lo que estaba sucediendo. El mismo periódico, Il Messaggero, preguntó a un destacado estudioso y ex presidente de una facultad pontificia dedicada a la mariología, el padre Salvatore Perrella, qué piensa al respecto. La respuesta de Perrella fue: «Vamos… personalmente, no lo creo ni por un segundo».
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