Policía investiga ataque a grupo pro-vida delante de centro de Planned Parenthood
La Policía Metropolitana de Washington, D.C. ha iniciado una investigación después de que dos consejeros pro-vida fueran supuestamente atacados fuera de una clínica de Planned Parenthood el 22 de julio.
Un grupo de consejeros pro-vida, que estaban allí para alentar a las mujeres a elegir la vida para sus bebés en gestación en lugar de someterse a un aborto, se encontraban reunidos con otros activistas pro-vida fuera de la clínica de Planned Parenthood en 4th Street, Noreste, la mañana del sábado. Se produjo una discusión verbal entre transeúntes a favor del aborto y uno de los activistas alrededor de las 11:40 a.m. y rápidamente se volvió violenta.
El informe de incidente público por la policía indica que dos sospechosos se acercaron a los activistas pro-vida y se involucraron en una confrontación verbal, que llevó a que uno de los sospechosos arrojara café a uno de los activistas. Cuando uno de los consejeros intentó detener la confrontación, uno de los sospechosos «agredió a [la víctima] golpeándolo al suelo y luego le dio varios puñetazos», según el informe.
Terrisa Bukovinac, fundadora de Progressive Anti-Abortion Uprising, dijo que fue a quien le arrojaron el café. Ella dijo que dos transeúntes a favor del aborto «nos estaban gritando y nos dijeron ‘que les den’. Yo les respondí con el mismo insulto».
Uno de los transeúntes respondió: «Dilo en mi cara», a lo que ella contestó: «¿Por qué no vienes aquí?», dijo Bukovinac.
Los transeúntes, un hombre y una mujer que paseaban a su perro al otro lado de la calle, cruzaron la calle en ese momento, según Bukovinac. Ella dijo que uno de ellos le arrojó el café, pero no pudo decir quién lo hizo.
«Lo siguiente que supe es que tenía café por todos lados», dijo Bukovinac.
Mike Gribbin, un consejero de la acera no afiliado a ninguna organización específica, dijo que cree que fue la mujer quien le arrojó el café a Bukovinac. Gribbin intervino en la confrontación, lo que finalmente llevó a que el hombre lo agarrara, dijo.
«El intercambio se volvió bastante acalorado y la mujer se metió en la calle para acercarse a nuestro lado de la acera y ella y Terrisa estaban gritándose mutuamente», dijo Gribbin. «La mujer arrojó su café a Terrisa, momento en el cual agarré el brazo de la mujer y su novio intervino».
«Su novio vino y me agarró y me sujetó», dijo Gribbin. Dijo: «Hice un intento de defenderme del novio que me estaba sujetando, pero no tuve éxito».
En ese momento, él alega que el hombre le dio un puñetazo y luego lo tiró al suelo. Cuando se levantó, dijo que el hombre lo volvió a tirar al suelo y le dio puñetazos repetidamente. El incidente fue capturado en video y compartido en línea.
«Me derribó las piernas», dijo Gribbin. «Sé que me estaba golpeando después de que me derribó por segunda vez y estaba de rodillas y luego me estaba golpeando en el costado de mi caja torácica».
Mientras esto ocurría, Bukovinac estaba grabando el altercado. Ella dijo que la mujer «se acercó a agarrar mi teléfono [y] me abofeteó en la cara». Dijo que el hombre también intentó quitarle el teléfono.
Gribbin dijo que el hombre y la mujer se alejaron del incidente antes de que la policía llegara a la escena. Él le dijo que los siguió a una distancia segura para señalarlos cuando llegara la policía. La policía interrogó a ambos sospechosos.
Bukovinac agregó que los oficiales que respondieron inicialmente le dijeron que la policía no presentaría cargos porque la confrontación fue «mutua, como si hubiéramos consentido ser agredidos». Ella y Gribbin fueron contactados finalmente por detectives que están investigando el incidente, y ella dijo que le aseguraron que «habrá consecuencias».
Bukovinac agregó que cree que la policía solo decidió tomar en serio la investigación porque el incidente fue compartido en línea. Dijo que la renuencia inicial del departamento de policía a investigar revela una «aplicación desigual de la ley».
Un portavoz del Departamento de Policía Metropolitana de Washington, D.C. confirmó que los detectives están investigando el incidente.
Se llamó a técnicos médicos de emergencia para atender a Gribbin, pero él dijo que no necesitaba ir al hospital. Dijo que tenía contusiones en el área de su caja torácica y en el costado de su cuerpo donde fue golpeado y se siente adolorido. También dijo que se raspó las rodillas y que una de sus rodillas estaba sangrando. Los médicos forenses no encontraron ninguna otra lesión.
Este no es la primera vez que Gribbin fue golpeado por participar en actividades pro-vida fuera de la clínica de Planned Parenthood en Washington, D.C. A finales de 2019, un hombre le quitó tiza a Gribbin cuando estaba escribiendo en la acera cerca de la instalación de aborto. Gribbin trató de evitar que el hombre huyera del lugar, momento en el cual el hombre le dio un puñetazo en la cabeza y la cara.
«Un hombre a favor del aborto robó la tiza que estaba usando para escribir mensajes provida y cuando lo enfrenté, se volvió violento y me golpeó y me derribó», dijo Gribbin.
Gribbin, quien ofrece consejería en la acera la mayoría de los sábados por la mañana para ofrecer recursos que afirmen la vida de las mujeres y para orar, dijo que las confrontaciones verbales y las amenazas son comunes.
«Recibimos muchos ataques verbales y en algunos casos amenazas, y definitivamente enfrentamos mucho abuso de transeúntes», agregó Gribbin.
Gribbin también señaló que los acompañantes de Planned Parenthood, que son voluntarios que acompañan a las personas hacia la instalación de aborto, «se colocan físicamente entre nosotros y las personas a las que estamos tratando de ofrecer información» y «nos ridiculizan y nos insultan».
«Los acompañantes son totalmente cómplices», dijo Bukovinac.
Bukovinac a menudo se une a los otros consejeros pro-vida en la acera los viernes y sábados porque es cuando están los acompañantes. Ella dijo que participa en la consejería en la acera, pero también defiende a los consejeros de los ataques verbales y las amenazas.
«[Me] pongo de pie y defiendo a nuestra comunidad mientras ellos defienden a los bebés», agregó Bukovinac.
Ella dijo que la mayoría de los incidentes son confrontaciones verbales o amenazas.
Hace menos de dos meses, el 26 de mayo, dos activistas pro-vida ancianos fueron presuntamente agredidos fuera de una instalación de Planned Parenthood en Baltimore. En este incidente, ambos hombres quedaron inconscientes por un breve período y uno de ellos requirió varias cirugías.
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